Práctica 11: La educación en 2030
Como futura docente que espero ser pronto me imagino cómo será la educación en 2030 y no pienso que vaya a ser muy distinta de la actual. Realmente son solo 12 años los que nos distancian de ese año y. aunque el progreso tecnológico evoluciona a pasos agigantados, esto no implica que se vayan a dejar atrás por completo los métodos de enseñanza tradicionales.
En todo caso, cambiarán los dispositivos en el aula: puede que en vez de usar pizarras ya solo existan pizarras digitales interactivas o táctiles, que en vez de usar libros de texto y de lectura físicos estos se visualicen mediante eBooks o tablets o que los móviles estén permitidos en el aula con ciertas restricciones. Igualmente, tendremos a alumnos con una mentalidad diferente a los de 2018, puesto que, además de los cambios en la tecnología, también están evolucionando otros ámbitos como los familiares, dentro de los cuales los roles familiares se están transformando con rapidez y este hecho afecta de manera significativa a cómo piensan los jóvenes.
Sin embargo, todo ello no implica que la forma de enseñar tradicional vaya a ser drasticamente modificada, pero si se mejorará o se intentará seguir mejorando las carencias que tiene actualmente. Por todo ello, opino que en 2030 el método de enseñanza-aprendizaje de los estudiantes será similar al del 2018, pero este será más enriquecedor al verse complementado con recursos que solo puedan proporcionar las TIC y los diferentes dispositivos electrónicos con los que cuente el aula. En todo caso, cabe señalar que esto siempre dependerá del profesor y del uso que haga de estos elementos.
En todo caso, cambiarán los dispositivos en el aula: puede que en vez de usar pizarras ya solo existan pizarras digitales interactivas o táctiles, que en vez de usar libros de texto y de lectura físicos estos se visualicen mediante eBooks o tablets o que los móviles estén permitidos en el aula con ciertas restricciones. Igualmente, tendremos a alumnos con una mentalidad diferente a los de 2018, puesto que, además de los cambios en la tecnología, también están evolucionando otros ámbitos como los familiares, dentro de los cuales los roles familiares se están transformando con rapidez y este hecho afecta de manera significativa a cómo piensan los jóvenes.
Sin embargo, todo ello no implica que la forma de enseñar tradicional vaya a ser drasticamente modificada, pero si se mejorará o se intentará seguir mejorando las carencias que tiene actualmente. Por todo ello, opino que en 2030 el método de enseñanza-aprendizaje de los estudiantes será similar al del 2018, pero este será más enriquecedor al verse complementado con recursos que solo puedan proporcionar las TIC y los diferentes dispositivos electrónicos con los que cuente el aula. En todo caso, cabe señalar que esto siempre dependerá del profesor y del uso que haga de estos elementos.
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